La Diputación se compromete a conservar y mejorar el yacimiento de Lucentum
El Gobierno Provincial iniciará este año las obras de restauración del Foro Romano de Lucentum con una inversión, a través del Plan Financieramente Sostenible, de 400.000 euros. Así lo ha anunciado esta mañana el presidente de la Diputación de Alicante, César Sánchez, en el acto de cesión de la titularidad del Tossal de Manises a la institución por parte del Estado.
“Se trata de un ambicioso proyecto y de una decidida apuesta por nuestra cultura que transformará definitivamente este enclave arqueológico y lo situará dentro de los mejores de Europa, tanto en conservación como en tecnología”, ha concretado el presidente, quien ha agradecido el trabajo de todas aquellas personas implicadas durante años en impulsar este yacimiento. Además, ha tenido unas palabras de reconocimiento hacia la arqueóloga sueca Solveig Nodstrom, quien en su día paralizó la intervención de las excavadoras en la zona.
El acto, conducido por el diputado de Cultura y Educación, César Augusto Asencio, ha contado con la presencia del delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, quien ha rubricado junto a Sánchez los documentos de cesión, así como el delegado de Economía y Hacienda en la provincia, Antonio Rodríguez, además del director del MARQ, Manuel Olcina, o el jefe del área de Arquitectura, Rafael Pérez, entre otras autoridades.
El presidente de la Diputación de Alicante ha insistido, además, en que “Lucentum es un icono de nuestro pasado y una oportunidad para nuestro futuro” y ha matizado que “la cesión de su propiedad a la institución provincial redundará en mayores beneficios científicos, sociales y de investigación, al tiempo que asegurará su continuidad”. En este punto, Sánchez ha avanzado que “queremos retomar, desde el área de Cultura, el desarrollo de una programación cultural de calidad para los meses de verano que incluya conciertos, teatro u ópera, una oportunidad para el disfrute de los miles de turistas que nos visitan”.
Por su parte, Juan Carlos Moragues ha agradecido a la Diputación su trabajo durante estos años y su implicación en las mejoras, inversión y musealización del yacimiento, al que ha calificado como “joya arquitectónica, monumental e histórica de la provincia, de la Comunitat y de España”. Por ello, ha insistido en la importancia de su preservación como icono turístico sin igual y como referente a nivel mundial.
Historia del Tossal de Manises
Poderosas murallas, anchas calles, viviendas, almacenes y cisternas aseguraban la habitabilidad de Lucentum en el siglo III a.C. La Diputación de Alicante ha tutelado desde sus inicios los trabajos de consolidación y musealización a través del MARQ. Más de 27 años de trabajo, como ha reconocido el presidente “en los que nos hemos encargado de excavar y transformar esta ciudad romana en uno de los yacimientos más importantes de la Comunidad Valenciana, a la altura de los más reconocidos de Europa”.
Con una extensión de 4,2 hectáreas –aproximadamente, el equivalente a cincuenta campos de fútbol-, el parque conserva toda la ciudad romana amurallada y cuenta con la declaración de Bien de Interés Cultural.
El arqueólogo y escritor alicantino Antonio Varcárcel, Conde de Lumiares, llevó a cabo las primeras investigaciones relevantes a finales del siglo XVIII, aunque no fue hasta 1931 cuando la Comisión Provincial de Monumentos comenzó con las excavaciones que descubrieron las primeras calles, termas y murallas. Precisamente este fue parte del origen del Museo Arqueológico de Alicante, que se creó para acoger las piezas recuperadas en el yacimiento, y el inicio de una relación con el Gobierno Provincial que actualmente se ha consolidado al asumir la propiedad de los terrenos.
En los años 50 y 60, la presión urbanística cercaba el Tossal de Manises y frustró los esfuerzos de la Diputación de Alicante para adquirir los terrenos. Sin embargo, en 1973 el Estado logró expropiar las parcelas en manos de particulares y delimitó la zona, tal y como la conocemos en la actualidad.
A partir de 1990 se retomaron las excavaciones y el MARQ emprendió un amplio proyecto de recuperación y puesta en valor de los restos arqueológicos, en colaboración con el área de Arquitectura de la institución provincial. Tras la consolidación de estructuras y actuaciones en el perímetro para proteger la zona del agresivo entorno urbano, a finales de los noventa se materializó un ambicioso proyecto para su musealización. El principal objetivo era convertir el yacimiento en un espacio inteligible para el público no especializado y poner al alcance del visitante la realidad de este importante legado patrimonial.
Entre otras actuaciones, se fijó un itinerario de visita al yacimiento lo más similar posible al original para facilitar la comprensión de la forma urbana pero, sobre todo, se eliminaron barreras para facilitar la accesibilidad en la medida de lo posible. También la musealización actuó de manera individualizada en los edificios y conjuntos de construcciones más relevantes con el objetivo de resaltar su tipología arquitectónica, incidiendo en los elementos que ayudan a su comprensión y apoyando la actuación con la instalación de paneles informativos a lo largo del recorrido.
Un complejo sistema de seguridad completó las actuaciones para recuperar el enclave que se inauguró en julio de 1998. Culminaba así la materialización del primer yacimiento arqueológico de la Comunitat Valenciana a la altura de los más reconocidos de Europa, tanto por las infraestructuras enfocadas al visitante como por las labores de investigación y conservación acometidas.