Finalizan las obras de restauración del Monumento al Pescador para devolverle su aspecto original
Los 40.000 euros destinados por la Concejalía de Infraestructuras permiten impermeabilizar el monolito y recuperar las piezas de cerámica
La parte con forma de monolito del ‘Monumento al Pescador’, denominado ‘Faro’, situado en la arena de la playa Carrerlamar, frente al Paseo Marítimo de El Campello, ha recuperado su aspecto original al finalizar las obras de restauración puestas en marcha por el Ayuntamiento de El Campello en octubre de 2014. La obra creada en 1991 por el escultor alicantino Arcadi Blasco, se encontraba muy deteriorada por la acción del mar, y gracias al Plan de Inversiones derivado del último remanente de tesorería, del que se han destinado 40.00 euros, ha vuelto a tener su aspecto original.
Pieza a pieza, todas las cerámicas han vuelto a formar el mosaico que trazó en su día Arcadi Blasco, como motivos alegóricos al mar y la pesca. Y lo que es más importante, se ha aplicado a todo el monolito un tratamiento de protección, llamado hidrofugación, para alargar la vida útil del monumento y frenar, lo más posible, el desgaste que pueda sufrir en un futuro al estar al lado del mar.
El alcalde de El Campello, Juanjo Berenguer, el concejal de Infraestructuras, Alejandro Collado, una técnico municipal y el responsable de la mercantil adjudicataria, la empresa alicantina Urbana IDR, han acudido esta mañana a comprobar el estado inmejorable de la obra. Ya se ha retirado el andamio y las vallas protectoras y el ‘Faro’ es perfectamente visible desde el paseo marítimo, incluso alarga distancia, aunque es al acercarse como se aprecia el trabajo minucioso de restauración.
La intervención ha consistido en retirar las piezas de cerámica, bajo la supervisión de un experto, reparar el monolito de hormigón (cuyo interior se encontraba en un estadio lamentable), reproducir las piezas cerámicas rotas o desaparecidas y la recolocación posterior de las mismas. Por último, se ha aplicado el tratamiento de hidrofugación, válido para unos tres años, por lo que en un futuro se seguirá conservando de mejor manera este monumento, símbolo local, que lleva casi 25 años siendo castigado por el mar, la arena y el viento.