Alicante ampliará la recogida de los residuos orgánicos a toda la ciudad para reducir los residuos del contenedor gris

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Updated: mayo 6, 2022

El nuevo contrato permitirá desplegar el contenedor marrón y reducir a la mitad el tamaño del gris para la fracción restode forma que pasen de 3.200 a 2.000 litros de capacidad

Gestión de Residuos empezará el despliegue el despliegue inicial de 2.000 contenedores con el contrato en vigor, que destina 300.000 euros a la fracción orgánica

Alicante, 5 de mayo de 2022. Reducir los residuos de rechazo que acaban en el vertedero es uno de los objetivos de la ampliación de toda la ciudad del contenedor marrón, previsto en el contrato que sale ahora a licitación, por el que los alicantinos depositarán los restos de comida para convertirlos en compost de alta calidad. Con ello y con el refuerzo de la recogida selectiva de envases y cartón, se podrá reducir el tamaño del contenedor gris, que irá perdiendo importancia, reduciéndose su tamaño de 3.200 a 2.000 litros y limitando los días de uso mediante la instalación de aperturas electrónicas.

“Uno de los objetivos principales del pliego de la nueva contrata de limpieza viaria y recogida de residuos que sale a licitación por 347 millones de euros para los próximos ocho años será el reciclaje y evitar el rechazo de residuos al vertedero, dentro del compromiso de avanzar hacia un modelo de economía circular que promulgan las normativas en materia de residuos autonómica, nacional y europea” comenta el concejal de Medio Ambiente, Limpieza Viaria y Gestión de Residuos, Manuel Villar.

La nueva contrata contempla destinar anualmente 18.973.626,42 euros solo a la recogida de residuos, con una plantilla de 60 operarios. La principal novedad será la ampliación a toda la ciudad de la recogida de residuos orgánicos, con el contenedor marrón, con el que se producirá un compost de alta calidad para el abono de jardines y campos de cultivo.

Y gran parte de las inversiones contempladas en el proyecto, que superan los 32 millones de euros y se prevé que los licitadores puedan aumentar dicha cantidad a los 40 millones para mejorar sus ofertas, irán destinadas a implementar los camiones recolectores para su recogida y traslado a la planta de tratamiento.

Desde el departamento municipal de Limpieza y Gestión de Residuos se trabaja con el objetivo de reducir paulatinamente la presencia del contenedor gris, que paulatinamente menguará su tamaño para equipararse con el resto de fracciones de residuos, especialmente con la orgánica, compartiendo una capacidad para 2.000 litros, frente a los actuales de 3.200 litros.

Villar ha explicado que “al igual que el marrón, al dispositivo gris se le incorporará a medida que se vaya implementando este proceso de transformación un sistema de apertura electrónico que contribuya a fomentar en los hogares la selección de los residuos y su depósito en los contenedores adecuados en los días indicados (amarillo para los envases, azul para el cartón, verde para el vidrio, marrón para desechos de comida y el gris para el resto), todo con el objetivo de fomentar el reciclaje y reaprovechamiento de los residuos, minimizando al máximo el residuo de rechazo que acaba en el vertedero”.

2000 contenedores

El objetivo del departamento que dirige Manuel Villar es iniciar el despliegue del contenedor marrón este mismo año con la incorporación de 2.000 unidades, cuyo contrato ya está adjudicado y que se va a abonar con remanentes con un coste de 1.778.700 euros. “El contrato en vigor destina 300.000 euros a la recogida del residuo orgánico, cantidad que se dedicará a adelantar el inicio de este despliegue antes de la adjudicación de la nueva contrata, que contempla un presupuesto anual que supera los tres millones de euros para implantar la recogida de los residuos orgánicos en toda la ciudad” ha resaltado Villar.

Los nuevos dispositivos serán más estrechos, más accesibles y con un reducido impacto visual, ofreciendo una imagen más moderna y amable. También contarán con apertura electrónica y dispondrán de mecanismos que faciliten su uso, como palancas de accionamiento, allí donde se requiera e indicadores en lenguaje Braille que faciliten su accesibilidad.